Desde nuestro Instituto queremos ser parte de la concientización de la lucha contra el Bullying, y es por eso que en este día tenemos la oportunidad de compartir sobre esta situación que afecta a muchos niños y jóvenes durante su etapa escolar y que tiene un factor clave: la prevención.
Desde el año 2013, cada 2 de mayo se conmemora el Día Mundial de la Lucha contra el Bullying, una fecha impulsada por la ONG Bullying sin Fronteras, pero que aún despierta la atención de muchos especialistas
La problemática no es nueva ni está en camino de erradicarse. De hecho, según datos globales de Unicef, -que reconoce la efeméride como tal- la mitad de los adolescentes del mundo sufre violencia en las escuelas. Alrededor de 150 millones de estudiantes de entre 13 y 15 años han confesado sufrir de violencia entre compañeros en la escuela y en sus inmediaciones.
El término ‘bullying’ fue desarrollado por Dan Olweus en la década de 1970 para hacer referencia a una forma de maltrato, normalmente intencionado, que se da en el marco de la escuela entre un estudiante (o un grupo de estudiantes) hacia otro alumno que es considerado el blanco habitual de los ataques. “Lo más importante es que hay un grupo que mira lo que pasa y se mantiene en el silencio, y eso es una pieza clave para prevenir el bullying”, aseguró a Infobae Gabriela Mures, profesora, directora de nivel inicial e integrante del Equipo Bullying Cero en Argentina, que reconocen el 2 de mayo como el Día Mundial de la lucha contra el Bullying.
Ante el constante hostigamiento que sufre el que padece la problemática, aquellos que se animan a contar por lo que están pasando muchas veces se enfrentan al desconocimiento o a la falta de un protocolo para poder actuar. En el bullying duele no solo el acoso psicológico de las palabras que retumban en la víctima, sino el escenario de la agresión; los participantes activos y pasivos del acoso. Aquel que ejerce el hostigamiento sobre el blanco suele ser un chico que padece o padeció algún tipo de acoso.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), es la primera causa de suicidio adolescente. Por eso, son cada vez más las acciones globales que se intentan llevar a cabo para combatir este fenómeno.
En nuestro país existe desde el 2017 la Ley Nº 19.098, “PROTOCOLO DE PREVENCIÓN, DETECCIÓN E INTERVENCIÓN RESPECTO AL MALTRATO FÍSICO, PSICOLÓGICO O SOCIAL Y SU APLICACIÓN EN LOS CENTROS EDUCATIVOS DEL PAÍS”.